miércoles, 14 de octubre de 2009

Ecuador y Perú acuerdan 7 acciones contra el terrorismo y el crimen

Las policías de los dos países intercambiarán información sobre narcotráfico, tráfico de armas, trata de personas... Los acuerdos se revisarán dos veces al año.

Las dos instituciones acordaron intercambiar, de manera inmediata, información para detectar organizaciones narcodelictivas dedicadas al tráfico de sustancias ilegales, precursores químicos y lavado de activos.

La lucha conjunta contra el narcotráfico fue el primero de una serie de acuerdos alcanzados entre los ministros de Gobierno de Ecuador, Gustavo Jalkh, y del Interior de Perú, Octavio Salazar Miranda. Ellos se reunieron la mañana de ayer en Tumbes, Perú. En la cita firmaron convenios de cooperación binacional en materia anticriminal.

A más de la lucha contra el narcotráfico, se establecieron medidas para combatir delitos como el tráfico de armas y municiones, el robo de autos y sus partes, la trata de personas, el contrabando de combustibles, etc.

Para avanzar en los diálogos, se establecieron siete mesas de trabajo, distribuidas según los diferentes delitos que se busca combatir. Los controles al tráfico de drogas y precursores químicos y de armas y municiones fueron los puntos de mayor preocupación.

Joel Loayza, director nacional de Antinarcóticos de Ecuador, consideró que el primer paso que se debe tomar es mejorar la asistencia técnica entre agentes especializados de los dos países.

Con esta postura coincidió Eduardo Peña Rocha, secretario técnico del Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana de Perú. Él afirmó que se debe mejorar el intercambio de información y acelerar la creación de centros de monitoreo de la criminalidad en las zonas de frontera. “Para esto nos fijamos un plazo de aplicación de tres meses”, indicó.

Según cifras de la Policía ecuatoriana, las provincias fronterizas con Perú se han convertido en zonas de paso para la droga y las armas ilegales. Y su destino es los grupos irregulares de Colombia.

Para frenar este suministro, las dos instituciones policiales acordaron implementar un registro conjunto de armas, municiones y explosivos. Así, se establecerá un sistema informático integrado de identificación balística. “Esto deberá hacerse de forma inmediata”, mencionó Carlos Aguirre, subdirector general de Operaciones de la Policía ecuatoriana.

Asimismo, se establecerán mecanismos de interconexión para intercambio de información de vehículos que hayan sido reportados como robados.

Existe un convenio que ya establece este tipo de cooperación. Sin embargo, no se lo ha aplicado; por lo que ayer se fijó un plazo de 90 días para ponerlo en marcha.

Todas estas medidas buscan reducir los altos índices de delincuencia transnacional, que afectan a los dos países. Tras cerca de seis horas de reunión, Jalkh y Salazar se mostraron satisfechos con los acuerdos y plazos suscritos.

“Se han establecido fechas concretas para la implementación de los acuerdos. En la línea de frontera se requiere de mayores niveles de coordinación”, señaló Jalkh. Su homólogo peruano consideró que las reuniones binacionales deben realizarse dos veces al año, para revisar cómo marchan los compromisos suscritos.

La próxima cita será en Ecuador.

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